Una breve historia del jean
El inicio de la saga del jean se puede fechar en 1850, cuando Levi
Strauss(Bavaria, 1829), al emigrar a Estados Unidos, desafió el mandato
familiar de trabajar en una tienda de Nueva York para, en cambio, diseñar la
ropa de trabajo requerida por los buscadores de oro de San Francisco.
Inicialmente se valió de tela para carpas y al agotarse el stock lo
reemplazó por Sergé de Nimes, un tejido medieval. Ese arcaico diseño de Levi
Strauss se perfeccionó en mayo de 1873 gracias a su asociación con el sastre
Jacob Davis. Las primeras colecciones comercializaron overalls con botones para
tiradores, un bolsillo trasero y otro para portar el reloj.
Luego les sumaron remaches de cobre para proteger los bolsillos y en
1930; luego de recibir numerosas cartas de maestros furibundos por el modo en
que los jeans rayaban los pupitres debieron recurrir a una fórmula más
sutil. El 501, con su etiqueta roja, fue uno de los cien
iconos de la moda exhibidos en el MOMA hacia fines de 2017 y en el contexto de
la muestra Es la moda moderna.
Del lado de otros pioneros, en 1917, Henry David Lee empezó
a publicitar sus creaciones para ropa de trabajo con bolsillos que fueron
pensados para portar herramientas. Una versión indica que los recursos
utilitarios surgieron de un pedido explícito del chofer del Mr Lee. En 1924,
los Lee Riders 200 ingresaron al guardarropas de los rodeo
cowboys; en 1929, sumaron los primeros jeans con cremallera y unos años más
tarde, los jeans a medida y los overoles infantiles. Otra firma precursora fue
la empresa Blue Bell Overall Company fundada en 1904, que luego comenzó a
llamarse Wrangler.